- ¡Guapa!
- ¿Perdón?
- ¡Hermosa!
- ¿Perdón, es a mi?
- Es a la estrella más linda y brillante que he visto bajar del cielo jamás. Si, es a ti. (Y una diminuta y arqueada sonrisa apareció en el rostro de la joven).
Sus ojos resplandecieron de una forma especial para siempre y la sonrisa nunca faltó en su cara. Y este encuentro se sucedió por muchos días más, cada noche en el mismo lugar, camino a casa...
Esas cosas son las que nos hace que a lo mejor un mal día se torne el mejor.
ResponderEliminarMe alegro por ti o por la protagonista;)
Qué bonita entrada! Un besito ♥
ResponderEliminar¡Pero que bonito! Y que suertuda la chica :)
ResponderEliminarBesitos guapa